Fernando Beltrán (Oviedo, 1956) abre esta singular antología con un epígrafe que inaugura su poética amorosa al modo de una verdadera mitología. Su escritura se propone aquí como una especie de "viaje sin fin / a la mujer poema", figura que con diversas variantes se convertirá en leiv motiv de esta recolección paciente de palabras, para celebrar la presencia femenina como inspiradora y artífice de la pasión amorosa. El autor transita con rigor y agudeza por toda su producción desde 1980 hasta hoy, recolectando aquellos textos que cantan el amor en sus diversas formas; añade unos cuantos inéditos y busca reescribir desde un nuevo orden reflexivo ese precioso material, para entregarnos estos 80 poemas incurables. El resultado es un nuevo libro en la mejor tradición de la lírica amorosa, pero con la temperatura y el tono de una voz de principios de milenio, entre la canción de amanecida y el fragmento minimalista, entre la crónica urbana y la confesión sentimental, entre copas y recortes fotográficos de una ciudad insomne, ebria como el hombre que la habita y poderosamente apasionada. Un gozador impenitente habita en estas páginas; un auténtico "amador" que se declara rendido ante una mujer eternamente ubicua, siempre una y plural, la de mil rostros y figuras: la amada invencible´, como declara el título.
La antología está dividida en cinco secciones tituladas "Amor ciego", "Bar adentro", "La pala del amor", "Martes, miércoles, llueves…" y "Punto y amarte", que suman los ochenta poemas prometidos. En ella recopila muchos textos de sus libros editados, junto con otros nuevos e inéditos.
(De la introducción Laura Scarano)